La sangre

Líquido rojo, viscoso, que circula por las arterias y venas, gracias a la acción de la bomba cardiaca (el corazón). Debido a su composición compleja y su rápida circulación, la sangre, al irrigar todos los tejidos, cumple múltiples funciones.

Esta permite, en particular, mediante la red capilar interpuesta entre la circulación arterial y la circulación venosa, el transporte del gas (oxígeno y gas carbónico), las sustancias nutritivas (glúcidos, lípidos, proteínas), los elementos necesarios para la defensa del organismo contra las bacterias, parásitos y virus (anticuerpos, eosinófilos, linfocitos, monocitos, polinucleares neutrófilos).

La circulación sanguínea es el resultado de las contracciones del músculo cardiaco. Con cada contracción, este envía aproximadamente la mitad de la sangre hacia los pulmones, desde donde el gas carbónico es evacuado en el aire expirado, mientras que el oxígeno es absorbido por los glóbulos rojos. La otra parte de la sangre es enviada por la aorta hacia los diferentes tejidos, de donde retorna por las venas cavas.

Composición de la sangre

El volumen sanguíneo está constituido, en casi la mitad, por células (eritrocitos, todavía llamados hematíes o glóbulos rojos; leucocitos, o glóbulos blancos; trombocitos, o plaquetas) y por el plasma.

Los eritrocitos contienen esencialmente la hemoglobina, pigmento cuyo rol fundamental consiste en transportar el oxígeno de los pulmones hacia los tejidos.

Los leucocitos constan de diferentes tipos celulares, los principales de los cuales son:

  • Los polinucleares neutrófilos y los monocitos, que juegan un papel esencial en la defensa no específica contra las infecciones.
  • Los linfocitos, soportes celulares de la inmunidad específica.

Las plaquetas juegan un papel esencial, con los factores de coagulación, en la formación del coágulo sanguíneo y, por consiguiente, en la hemostasia (detención de las hemorragias).

El plasma es un líquido amarillo paja, compuesto en un 95% de un agua ligeramente salada (9 ‰) y de otros numerosos elementos, en cantidad variable, incluidos elementos nutritivos, residuos y proteínas. Sus propiedades fisicoquímicas son notablemente constantes, en particular el pH (grado de acidez) de 7,42 y la concentración de diversos iones (sodio, potasio, cloro, fosfato, etc.).

  • Los elementos nutritivos del plasma son los azúcares, en particular la glucosa, las grasas (colesterol, triglicéridos, ácidos grasos), los aminoácidos, las sales minerales y las vitaminas.
  • Los residuos del plasma son principalmente la urea y la bilirrubina. La urea es el producto final de la degradación de las sustancias nitrogenadas. Mientras que la bilirrubina proviene de la hemoglobina y es el resultado de la destrucción de los glóbulos rojos por los macrófagos.
  • Las proteínas del plasma son extremadamente numerosas. Son en particular todas las proteínas de la coagulación, incluido el fibrinógeno (un plasma cuya fibrina ha sido eliminada se denomina suero) y la albúmina, proteína cuantitativamente más importante del plasma en estado normal, la cual cumple un rol esencial de transporte de hormonas y vitaminas. Las proteínas del plasma incluyen, igualmente, las hormonas y ciertos factores de crecimiento, mensajeros químicos transportados por la sangre para regular la producción de las diversas células del organismo (eritropoyetina, por ejemplo, la cual estimula la síntesis de los glóbulos rojos por la médula espinal).

El gran tamaño de las proteínas les impide pasar de la sangre hacia los tejidos y permite al plasma retener el agua. Este mecanismo, denominado presión oncótica, tiende a mantener constante el volumen sanguíneo.

Análisis de la sangre

Este permite obtener informaciones sobre su composición en glóbulos, proteínas, antígenos, anticuerpos y gas. Existen 3 principales tipos de análisis sanguíneos:

  • Los exámenes hematológicos,
  • Los exámenes bioquímicos,
  • Los exámenes microbiológicos.

La sangre es obtenida en una vena del pliegue del codo, con ayuda de una jeringa, después de colocar un garrote sobre el punto de punción. En ciertos casos, cuando algunas gotas bastan, se toma la muestra pinchando el extremo del dedo.

Los resultados de las pruebas son comparados a normas estándares, las cuales pueden variar en función de la edad y del sexo del paciente, pero igualmente según el método empleado por el laboratorio que realiza el análisis.
Ahora, entremos al meollo del asunto: ¿Qué es la hemostasia?